martes, 23 de agosto de 2022

22 de agosto de 2022

 


Cuando nos unimos

somos capaces de superar lo más difícil,

lo más duro, 

lo más terrorífico. 

Anoche, nuestras manos juntas hablaron por sí mismas. 

Nuestros corazones hermanados marcaron el camino.

Con los ojos cerrados, 

sentimos la arena bajo los pies,

oímos el murmullo de la espuma,

aspiramos el aroma a salitre.

A modo de mantra, 

ofrecimos nuestra paz al mar 

y él nos regaló su calma. 

El hechizo surtió efecto.

Lo logramos juntas.

Pero no solo fue la unión de nuestras manos, 

fue la fe en nuestra capacidad,

en nuestra fantástica energía, 

lo que hizo vibrar el momento.

La fuerza de la imaginación acabó generando un mundo real; 

un mundo de abrazos, besos, ilusiones y amistad.

En esta ocasión, 22 fue la excusa.

La Magia la pusísteis vosotras.

Gracias por tanto.


1 comentario:

Mila Martínez dijo...

Gracias a ti, hermanita. Siempre estás ahí. Abrazos enormes.
Mila