martes, 14 de septiembre de 2010

Eva nos anuncia algo

Sigo la mirada de la camarera y puedo leer en sus labios la frase que desliza al oído de una de sus compañeras: “Me dejaría comer entera”. En aquel momento ya tengo claro que Eva está recorriendo el sendero sembrado de candeleros que lleva hasta mi mesa. Un segundo después la veo aparecer y no puedo evitar que se me escape una sonrisa. Ella me mira con el ceño fruncido, algo mosqueada. Se sacude el flequillo hacia atrás y sus ojos oscuros echan chispas. Se ha desprendido del estilo sobrio que le otorgan sus trajes de chaqueta de abogada agresiva, para meterse dentro de una camiseta negra y unos vaqueros de cintura baja, en cuyos bolsillos esconde las manos como para protegerse de algo. — ¿Qué pasa? —Nada, siéntate —le digo riéndome mientras me acerco a besarla. — ¿Y esas risitas? —Es por algo que ha dicho la camarera nada más vertele suelto divertida—. Por cierto, ahí viene. —Tráeme uno de esos —le lanza señalando mi Beso de Luna. —Te lo sirvo en un minuto —le contesta la joven en un tono que hace pensar que, con la copa, viene ella incluida nadando desnuda dentro del cóctel. Eva, imperturbable, le aguanta la mirada sin pestañear. No puede perder su reinado de chica dura… Espero a que se aleje y observo la cara seria de Eva muerta de risa. —Desde luego, espero que María no te deje nunca, o no podrás salir a la calle… —Paso. —Vale, cambio de tercio. ¿Nos vas a hablar de tus amigas y su nueva situación? — ¿Qué quieres saber? —Por ejemplo, lo que opinas de lo de Mel y Carla… — ¿La verdad? —Por supuesto. —Una putada. Mel lo lleva bien porque en el fondo es una buenaza y la morena la vuelve completamente loca. Pero a Carla, ya le vale… —Bueno, creo que ambas han tomado una decisión de la que no se arrepentirán… —Eso espero. Sobre todo, por Mel. —Bueno, y Patricia… —Me parece tremendo lo que ha hecho. Además, casi no lo cuenta… —Sí, eso me pareció oír…—digo sonriendo traviesa. En ese preciso instante regresa la camarera y deja un flamante Beso de Luna ante Eva. —Tu copa —le dice mirándola con atrevimiento. Eva suspira y le suelta: —Cariño, tu mamá te está esperando en casa. La muchacha le sonríe con su mejor cara de Lolita pervertida y se aleja simulando estar ofendida. Me encanta la escena. Presenciar las reacciones que provoca Eva, especialmente en el género femenino más joven, es divertidísimo. Sobre todo porque consiguen sacar su parte más borde. —Bien —digo tragándome la risa—, creo que has venido a comunicarnos una primicia. —Pues sí, las chicas y yo vamos a acompañarte el viernes 1 de octubre a la presentación de esa aventura que has creado para nosotras: Tras la pared. —La verdad es que me resulta muy difícil ir a cualquier sitio sin vosotras… —Ni te atrevas. —No lo haré. El viernes, 1 de octubre, a las 19:30, estaremos todas con vosotr@s en la librería BiblioCafé, Amadeo de Saboya, 17 de Valencia, en un entorno cálido invadido de amig@s, vino, libros y más… Y, después, a partir de las 23:30 continuaremos la fiesta en el SOM COM SOM, el pub de moda de Valencia en la calle Cádiz, 75, hasta que el cuerpo aguante. Allí habrá más libros, para l@s rezagad@s... Os esperamos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Ok, allí estaremos.A ver si vemos a las chicas y nos adelantan algo del tercer libro....
Me a gustado el encuentro con la camarera.Muy interesante...
Bsos, Guapas.
Tu Fisio.

Mila Martínez dijo...

Igual sí adelantan algo, no sé. Se lo tendrás que preguntar a ellas, ja,ja...Un beso "mi fisio". Nos vemos allí.